Un desabrido encuentro fue el que plantearon ambas escuadras, los panaderos tuvieron un poco más la pelota, pero sin generar riesgo.
Con tantas declaraciones cruzadas previo al partido, el ambiente de la semifinal entre la Universidad de Chile y Unión Española, estaba encendida, pero la realidad fue dura. El partido fue un somnífero en donde ninguno de los dos equipos generaron real riesgo en el arco contrario. Lo mejor de todo fue el público que llenó el estadio CAP de Talcahuano.
En el primer tiempo se vio más sólido el cuadro hispano, tenían más la pelota, pero no generaba mucho riesgo. La U demostraba la mejoría defensiva que ha potenciado en los últimos encuentros. Lo malo es que en el minuto 26 Luis Casanova, se lesionó y tuvo que ser cambiado. Él, junto a Nery Domínguez le han dado solidez a la parte trasera azul.
En los minutos 34 y 35 la Unión tuvo dos oportunidades claras, primero con un remate de Rodrigo Piñeiro y después con otro de Jonathan Villagra, pero nada prosperó. Todo seguía en cero.
A los 39 llegaron más problemas para los azules. El argentino Nery Domínguez se lesionó y tuvo que ser reemplazado por Daniel Navarrete.
Si bien el primer tiempo fue la Unión, por su dominio y las mayores aproximaciones, los minutos finales el bulla tuvo opciones claras con el Chorri Palacios y otra de Israel Poblete.
El segundo tiempo fue similar. Los dirigidos por Canales llegaban a ¾ de cancha, pero en los metros finales siempre fallaban los pases. Imprecisos ambos equipos. Fome partido para ver con pocas llegadas claras de peligro.
Al final todo se resolverá en Santiago, cuando la Unión tenga que recibir a la U.
